En una frase he resumido lo que seguramente dentro de uno o dos años será mi carta de presentación para poder optar a un “puesto de trabajo” en alguna empresa de este país. ¿Qué sucede con el talento en España? ¿Dónde están las oportunidades para miles de estudiantes que están dispuestos a aprender a cambio de muy poco? ¿Hay alguien en este bendito país que sea consciente de que se ha llegado a un punto de no retorno ante un problema como es la no integración de posibles nuevos talentos en las empresas? Apuesto que viendo el gobierno que nos representa en Europa y ante el mundo, no es difícil pensar, que no se plantean preguntas como estas.
Voy a simplificar de forma infantil algo que es mucho más complejo en sí mismo, pero que de esta forma, quizá si alguno de nuestros políticos y empresarios, AMBOS RESPONSABLES de esta situación, leen, podrán entender hasta con un simple vistazo, sin necesidad de tener un alto cociente intelectual.
EMPRESAS = PERSONAS, en consecuencia, si no hay PERSONAS, no hay EMPRESA.
Sé que esto puede resultar difícil para muchos directivos, dirigentes de partidos políticos y personas con cargos de relevancia en cualquier rincón de nuestra geografía, pero creo que si se esfuerzan en dedicar un par de horas a esa simple frase, lograrán entender que sin personas cualificadas, no hay empresas competentes, que si no hay empresas competentes y con futuro, no habrá puestos de trabajo dignos y que otorguen bienestar a la ciudadanía, que si el país no se dirige como un gran equipo, solo seremos mercenarios con un único objetivo, el beneficio personal y no global.
Cabe decir, que el gran problema de España a grandes rasgos, radica en un problema de cultura, no hay suficiente nivel cultural como para poder estar a la altura de países como Alemania, Holanda, Bélgica o Reino Unido, somos la cola de Europa porque no podemos estar en otro lugar, estamos limitados a dirigentes que no forman parte de la élite, y entre otras cosas, a residuos culturales como son la televisión, la prensa escrita y las diferentes radios que solo se preocupan de índices que solo creen entender ellos. Nosotros, los jóvenes estudiantes, no estamos dispuestos a ser moneda de cambio para obtener beneficios, queremos ser tratados como personas, queremos ser valorados como profesionales y queremos que nos exijan lo mismo que nosotros exigimos, seriedad y profesionalidad. Necesitamos oportunidades, necesitamos que crean en nosotros y que nos abran puertas para crecer como profesionales, no queremos ser seleccionados a dedo ni queremos ser objeto de beneficios sin merito, la juventud preparada de este país, solo quiere tener un lugar donde poder realizarse y donde poder convertirse en un valor esencial para el futuro.
Esta frase lo resume todo:
"No hay inversión más rentable que la del conocimiento."
Benjamin Franklin.
Luis Corleone
